Aquí estoy
en la tierra
mi boca
abierta
y
ni siquiera puedo decir
mamá,
y
los perros corren y paran y mean en
mi lápida; lo tengo todo
excepto el sol
y mi traje se está
arruinando
y ayer
los restos de mi brazo izquierdo
desaparecieron
quedó muy poco, todo como arpa
sin música.
Al menos un borracho
en la cama con un cigarrillo
puede movilizar 5 camiones
de bomberos y
33 hombres
yo no
puedo
hacer
nada.
Pero p.d.—Hector Richmond en la próxima tumba
piensa únicamente en Mozart y los golosos gusanos
él es
muy mala
compañía.
1 comentario:
Descarnado como siempre, toda una obra. Gracias por compartir.
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