Aquel poeta había sido famoso
y después de unas décadas de
oscuridad
tuve suerte
y aquel poeta pareció
interesarse
y me pidió que fuera a su
apartamento en la playa.
el era homosexual y yo
heterosexual, y lo que es peor,
joven y lozano.
Llegue, eche una
mirada y
declamé (Como si no lo
supiera), "Hey! Donde
cojones están las
tías?"
el simplemente sonrió y se toco
su mostacho.
Tenia pequeñas lechugas y
delicados quesos y
otras exquisiteces
en la nevera.
"Dónde guardas la jodida
cerveza, tío?" Le
pregunte.
no importaba, yo había
traído mis propias
botellas y empecé
con ellas.
Comenzó a parecer
alarmado: "He oído sobre
tu brutalidad, por favor desiste de
ella!"
me apalanque en su
cama, eructé: "ah, mierda nena, no voy
a hacerte daño! ha, ha,
ha!"
"eres un excelente escritor," dijo
él, "pero como persona eres
extremadamente
despreciable"
"eso es lo que más me gusta de
mi, nena!"
continué sirviéndome
bebida
en seguida
pareció desvanecerse tras
unas puertas correderas
de madera.
"eh nena, sal de
ahí! no te voy a hacer nada
malo! podemos sentarnos y
hablar sobre esa estúpida mierda
literaria toda la
noche! no te
embruteceré,
mierda, lo
prometo!"
"no te creo!,"
dijo una
vocecita
bien, no podía hacer nada
sino
seguir bebiendo, estaba
demasiado borracho para conducir
a casa.
cuando me desperté por la
mañana, el estaba de pie inclinado sobre
mi
sonriendo.
"uh," dije,
"hola..."
"decías en serio lo que me
dijiste la pasada noche? pregunto
el.
"ah, el
que?"
"abrí las puertas y me estuve
ahí de pie y tu me viste
y dijiste que
parecía que yo estuviera surcando
el mar en la proa de un gran
barco... dijiste que
parecía un
escandinavo! es
cierto?"
"oh, si, si, lo
parecías..."
me preparó te caliente
con tostadas
y me lo
zampé.
"bien," dije, ha
sido estupendo
conocerte..."
"estoy seguro," contesto
él.
la puerta se cerro detrás
mío
y encontré el ascensor
para bajar
y
después de vagabundear un poco por
la playa,
encontré mi coche,
subí, y me fui
en lo que parecían ser
términos agradables
entre el famoso poeta y
yo
pero
no era
así:
el empezó a escribir material
increíblemente odioso
sobre
mi
y yo
dirigí mis disparos hacia
el.
todo el asunto
fue mas o menos
como
la mayoría de encuentros de otros
escritores
y
de todos modos
esa parte sobre que
le llame
escandinavo
no era cierta en
absoluto: Le llame
vikingo
y tampoco
es cierto
que sin su
ayuda
yo nunca hubiera
aparecido en la
Penguin Collection of
Modern Poets
junto a el,
y quien
era?
ah, si:
Lamantia.
2 comentarios:
Me encanta este poema.Guarda toda la esencia de Bukowski.
Bukowski,simplemente excepcional.
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